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Ecodiseño, el futuro inmediato del diseño de productos y servicios

El “ecodiseño” es un concepto con una difusión cada vez mayor en el mundo empresarial: se  refiere al proceso mediante el cual se identifican y tratan de minimizar todos los impactos ambientales que puede producir un producto o servicio en todo su ciclo de vida, desde la misma selección de las materias primas para su fabricación hasta la gestión de los residuos que producirá, sin que afecte en modo alguno a su calidad o prestaciones.

A través del “ecodiseño”, diseño ecológico o sostenible, se busca por tanto un objetivo principal, el de reducir al máximo las consecuencias negativas de un producto o servicio sobre el entorno ambiental (e incluso social). Sin embargo, la consideración de parámetros ecológicos en el diseño de un producto o servicio va más allá: implica además ahorro de costes (en consumo de materiales, mejora de envases y embalajes, etc.), diferenciación de la oferta de la empresa, mejora de la imagen ante consumidores y Administraciones, apertura de nuevos nichos de mercado… y, en general, una ventaja competitiva para aquellas industrias que apuestan por esta línea.

Pero, además, la inclusión de criterios propios del ecodiseño se generalizará en un futuro inmediato pues el respeto por el entorno, la atención a conceptos de Responsabilidad Social Corporativa, son una demanda creciente en una sociedad cada vez más concienciada con el futuro ecológico del planeta.

Un mundo de posibilidades

Las posibilidades del ecodeseño son múltiples, pudiendo destacar, entre otras, el aumento de la cantidad de producto sin modificar las características del envase, el empleo de materias primas procedentes de fuentes renovables para su fabricación, el uso de envases con certificado de gestión sostenible FSC, que acredita el origen de recursos naturales bien gestionados, la eliminación de la  tinta empleada o bien la eliminación de las superficies impresas, el empleo de menor volumen de envase para comercializar la misma cantidad de producto y la supresión de asas, solapas de las cajas y altura de los tapones, entre otros.

Ejemplo de ecodeseño por excelencia podría ser la evolución de los tradicionales tambores de detergente a envases más ligeros, pequeños y concentrados, permitiendo una mejor transportabilidad de los mismos, una mejor gestión del espacio ocupado y, por supuesto, una mejor gestión del envase una vez agotado el uso para lo cual fue pensado.

Jornada

La sede central de la CEL acoge el próximo día 30 de septiembre, martes, la jornada “Las posibilidades del ecodiseño para el ahorro en las empresa”. Organizada con Sogama y Economía Digital, contará contará con las intervenciones de María Pérez Sáinz, técnico del Departamento de Prevención y Servicios a Empresas de Ecoembes, y Alberto Cabadas Avión, director gerente y director de calidad de Aguas de Mondariz (Fuente del Val S.L.).

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